Para algunos fans de BMW, el nombre Gran Turismo tiene un cierto regusto a rancio desde hace unos años. Sin duda, el Serie 5 GT es un coche excelente para viajes largos y ofrece un confort exquisito, así como mucho espacio, pero ¿le sienta realmente bien a BMW?
Con el BMW Serie 3 GT F34, la empresa de Múnich quiere hacerlo todo mejor: se supone que es más bonito, más dinámico y, en general, mucho más cercano a los valores fundamentales de la fábrica bávara de motores. En los últimos días, hemos comprobado de cerca si realmente es así, utilizando como ejemplo un BMW 335i GT con paquete deportivo M.
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El paquete M y el exclusivo color Azul Estoril Metalizado hacen que la respuesta a la primera parte de la pregunta sea especialmente fácil: no hay duda de que con los faldones más agresivos del paquete deportivo y el azul fantásticamente brillante, este Gran Turismo es un auténtico reclamo que ni siquiera las llantas más pequeñas y los neumáticos de invierno pueden desfigurar.
El interior del Serie 3 GT también se beneficia claramente del paquete deportivo M, que, además de los asientos deportivos disponibles para otros modelos, lo dota de un volante deportivo especialmente fácil de agarrar y con un diseño de filigrana. Las molduras hexagonales de aluminio y los listones decorativos en Azul Estoril mate que continúan en las puertas traseras acentúan el lado deportivo del F34 y casi hacen olvidar el espacioso asiento trasero.
Esto también es fácil porque la puesta a punto de la suspensión es agradablemente cercana a la de la berlina de la serie 3 y no evoca ningún recuerdo de su hermano mayor. En el modo Sport, la suspensión del GT es agradablemente firme y se asienta firmemente en la carretera sin ser excesivamente dura. Esto permite al conductor y a los pasajeros disfrutar de su estancia en el BMW Serie 3 GT, lo que también se aplica sin restricciones a los dos pasajeros traseros exteriores: como el GT -al igual que la versión larga del Serie 3 F35 sólo disponible en China- tiene once centímetros más de distancia entre ejes, hay bastante más espacio para las rodillas en la parte trasera. El espacio para la cabeza también es notablemente más generoso que en la berlina ordinaria y está lejos de la media de la clase media superior.
En la primera fila, la actual generación del BMW Navigation System Professional define la referencia de la clase media en infoentretenimiento. Acceso ilimitado a Internet, guía dinámica de rutas con información de tráfico en tiempo real RTTI, el práctico servicio Concierge y mucho más: ningún deseo queda sin cumplir. Como conductor, siempre tienes la información más importante en tu campo de visión gracias al Head Up Display y puedes concentrarte en el tráfico lo mejor posible. Sin embargo, si por un momento deja de prestar atención, los numerosos sistemas de asistencia entran en acción y le advierten de situaciones peligrosas mediante vibraciones en el volante o señales visuales y acústicas.
Sin embargo, la absoluta joya del BMW 335i GT que probamos sigue estando delante del habitáculo y siempre está presente, aunque apenas se vea. El motor N55 de seis cilindros en línea, conocido de varios otros modelos, también brilla a bordo del BMW 335i F34 con una combinación única de sonido deportivo, entrega de potencia extremadamente superior y eficiencia asombrosa.
En la conducción diaria, el 335i GT se puede conducir sin esfuerzo con menos de diez litros cada 100 kilómetros a pesar de sus 306 CV; con un tráfico urbano reducido, también se pueden conseguir unos ocho litros. Los que sucumban al sonido y quieran experimentar el 335i regularmente a más revoluciones tendrán que hacer, naturalmente, paradas en boxes más frecuentes.
Para la mayoría de los clientes, sin embargo, el rendimiento es probablemente más importante que el consumo de combustible – después de todo, el modelo superior rara vez se compra principalmente para ahorrar dinero. Con su par motor de 400 Newton metro, disponible a partir de 1.200 revoluciones, al 335i GT nunca le falta la pegada necesaria en ninguna situación. En caso necesario, la caja de cambios automática de ocho velocidades también engrana una marcha inferior con gran rapidez en las maniobras de aceleración espontánea y ofrece al N55 un margen de desarrollo óptimo.
Acompañado por el sedoso sonido del motor de seis cilindros en línea, el coche avanza entonces con vehemencia, con los neumáticos de invierno en el eje trasero gimiendo ocasionalmente pidiendo clemencia a bajas velocidades. Si lo desea, puede animar fácilmente a la parte trasera del BMW Serie 3 GT para que gire con usted y juegue con los límites de la forma típica de los potentes coches de tracción trasera. El Gran Turismo nunca se pone pesado, y la larga distancia entre ejes contribuye a su controlabilidad.
La conclusión es que el BMW 335i GT con paquete deportivo M se presenta como un todocamino que responde a los retos habituales de la vida cotidiana con tamaño en la parte trasera y un maletero espacioso, sin dejar de ofrecer la dinámica apreciada en todo el mundo de un BMW Serie 3. Sin una comparación directa, es probable que casi ningún cliente note los kilos de más del Gran Turismo, sobre todo porque el seis cilindros en línea de más de 300 CV hace un gran trabajo disimulando el peso.
Aquellos de naturaleza especialmente dinámica que puedan prescindir de las ventajas prácticas del GT y también quieran llevar su coche de diario al circuito de vez en cuando, probablemente estarán mejor servidos con la berlina clásica o el Serie 3 Touring. Para todos los demás, el Gran Turismo es un compromiso acertado que combina la dinámica de conducción de la clase media con el espacio y el confort de la clase de lujo.