Primera prueba de los nuevos Porsche Macan y Macan S

El Porsche Macan solo tiene cuatro años, lo que lo convierte en el modelo más joven de la compañía de Stuttgart, si excluimos de la ecuación al Panamera Sport Turismo. Y, sin embargo, es el superventas por excelencia, casi superando la barrera de las 100.000 unidades en un solo año. ¿Cómo se revisa un modelo tan importante? La respuesta es discreta pero precisa. Informe de conducción de los nuevos Porsche Macan y Porsche Macan S. ¿Un coche de ocasión? Elige entre los miles de coches segunda mano Crestanevada.

El Porsche Macan cuenta con un motor familiar. En la UE, el motor turbo de gasolina de 2,0 litros rinde 245 CV (370 Nm). Si se omite el filtro de partículas de gasolina -para mercados no comunitarios-, es un familiar de 252 CV. El Porsche Macan S también incorpora un filtro de partículas. El motor V6 turbo de 3.0 litros rinde 354 CV (480 Nm). Ambos modelos cuentan con la tracción total trasera típica de Porsche y el cambio PDK de 7 velocidades. Como quieren mantener el carácter deportivo del Macan, siguen utilizando la transmisión de doble embrague y no la automática de convertidor de par como en el Cayenne.

Además del diseño -sutiles cambios en el frontal con luces diurnas en forma de X y una generosa banda luminosa en la parte trasera-, también se ha revisado el chasis. El objetivo era lograr un mayor equilibrio entre confort y deportividad. Los amortiguadores adaptativos son incluso mejores que la suspensión neumática opcional. Ambos modelos son dinámicos de conducir, por un lado debido a la propulsión en sí, por otro lado también debido a los neumáticos mixtos. Incluso el 4 cilindros puede agitarse deportivamente por los carriles y rápidamente deja atrás a los SUV compactos más potentes y ligeros. Pero la potencia no lo es todo: el chasis, la dirección y los neumáticos también tienen que ser los adecuados. Más información en nuestro reportaje de vídeo.

Un sutil cambio de imagen mantiene fresco al Porsche Macan

La actualización del diseño hace que el modelo, aún joven de por sí, luzca fresco durante los próximos años, ya que ahora va visualmente de la mano de la nueva firma, especialmente en la parte trasera. En la parte trasera se ha mantenido el carácter tridimensional del Macan, incluso con las letras Porsche exentas. La consola central del Cayenne y el Panamera se utiliza para que la frescura repercuta también en el interior. Las rejillas de ventilación se han desplazado hacia abajo y la pantalla táctil ha pasado de las escasas siete a las 11 pulgadas. Además de la navegación online, Porsche también ofrece de fábrica el módulo Connect. En definitiva, una renovación acertada, que sólo se nota en los detalles o quizá para los entendidos, pero que hace que el superventas esté en forma para los próximos años.